Este fin de semana se celebró en Alcorcón el máster y la gala final de la AECB. Tras finalizar los 7 opens de los que constaba el circuito de la AECB, Juanjo se metió en la gala ORO, Pedro en la PLATA, Reme en el máster y yo (Morlanitos) en el máster y en la gala PLATA.
Iniciamos la competición el Sábado con la serie de las 10 de la mañana. El primer contratiempo lo sufrimos con Reme que, tras una dura jornada de trabajo el día anterior, no podía moverse de cintura para arriba (en plan jocoso yo dije que un palo de escoba tenía más flexibilidad que Reme este finde). Tras todo el lío organizado para poder acudir al máster, una lástima llegar en estas condiciones y no poder lucharlo, así que bastante hizo jugando...el resultado fue lo de menos.
Yo empecé la serie del máster con una zona "buena" pero unos agujerillos me privaron del 200 y me quedé en 179. Me fui para la zona de Juanjo y Pedro para animarme un poco, pero vi que ellos aún empezaron peor, 150 y 158, así que me dí media vuelta y regresé a mi zona. Del resto de sus series poco puedo comentar porque estuve metido en la mía buscando sitios por donde tirar. un 144 de segunda partida condenó mi serie y como no hice ningún partidón, no me clasifiqué.
Pedro parecía entonarse poco a poco y encadenó tres partidas buenas (188,205,201) pero flojeó al final y se quedó fuera de la final por 50 bolos. El cambio último de pistas le perjudicó y no pudo completar la remontada. Por su parte, Juanjo no terminaba de encontrar la zona de juego ideal y encadenaba 4 partidas bajas entre 146 y 160. En el último cambio de pistas, encontró la zona y obtuvo dos buenas partidas (256 y 225) pero ya insuficientes para clasificarse.
Ya solo quedaba una posibilidad y era mi serie de la gala pero, visto lo visto, la cosa no pintaba bien. Tras reponer fuerzas con una buena comida, me acordé de cuando Aurora le patina la bola y empieza a dejarse agujeros y más agujeros. Yo por la mañana tenía una buena zona pero con poco margen y, cuando tocaba una tablilla mas por fuera, la bola no volvía y era agujero, así que me rondaba la idea de arriesgar y lijar la bola.
Tras comentarlo con Juanjo, le pareció buena idea y decidimos lijar la bola a 500...mano de santo. El margen que me dió este lijado aumentó la zona de juego y, cuando me equivocaba, conseguía que no fueran agujeros la mayoría. Las sensaciones en las bolas de prueba mejoraron, y con ello la confianza en el soltado, y más cuando empecé la primera partida con 231. Todo parecía ir sobre ruedas pero las pistas y yo empezamos a cambiar, tocándome sufrir en la segunda y tercera partidas con 175 y 164.
El margen del 231 se acababa y tocaba ponerse las pilas de nuevo. Un 216 y un 214 me dejaron de cara a la última partida prácticamente clasificado, y metiendo un 194 de sexta, conseguí meterme segundo y muy bien posicionado de cara a la final del domingo, donde jugaría 6 partidas más que se me sumarían a los 1260 bolos que había hecho (1194+66 de hándicap). Decir que los tres primeros al final del Domingo jugarían una defensa de posición.
Tras ver ganar con holgura a la selección española, mi día de la final empezó a las 5.40 de la noche...sí, no me he equivocado. Me desperté y no conseguí dormir de nuevo, pero las 5 horas que dormí, fueron bien dormidas y me encontraba muy descansado. Desayuné, me fui a pasear y, cuando Pedro y Reme bajaron, volví a desayunar...y aún así, casi me quedé con hambre ;)
En la final, me tocó compartir pista con tres monstruos de los bolos (Pacorro, Arjonilla y Erwin), que supieron aceptar con alguna que otra sonrisilla mis plenos pasados cuando no soltaba bien la bola o mis típicos morlanitos, pero también estuvieron animando. Tras una buena primera partida de 214, me agarrote un poco y sufrí en la segunda para sacar un 181. Ni que decir tiene que el fantasma de mis típicas "partidas tontas" en las finales rondaba por mi cabeza...esta vez no podía permitirme un 114 como en otras ocasiones. Poco a poco me iba encontrando mejor y más suelto y, pese a un mal inicio de tercera partida, remonté e hice 233 seguido de un 190 en la cuarta.
Los demás tampoco se salían demasiado con sus partidas, así que cada vez esta más metido para mi primera gran defensa de posición. LLegados a la quinta, empecé con pleno, me doblé y empecé a respirar porque veía que podía ser el día. Diez minutos más tarde, pasé de respirar a cortárseme casi la respiración...pero esta vez por cosas buenas, llevaba 8 plenos de inicio. Tiré el noveno y strike....tiré el décimo y uissssssssssssssssssss....bolo 10 ahí riéndose de mí. Me dió pena el bolo y lo fallé, pero hice un 267. Ya metido para la defensa de posición, completé la serie con un 245 para un total de 1330 a scratch (segunda mejor serie del día a tan sólo 20 bolos de Erwin).
Con esta serie, entré como primero a la defensa de posición y me tocó jugarme la victoria con Lucian del Pink Power (que ganó a Jean François Fievet). Me encontraba más tranquilo de lo esperado para mi sorpresa, aunque algo frío por el parón, y eso se notó en mis tiros. Lucian empezó fuerte, (dos semis y 3 strikes) y yo me dejé un cuadro abierto, por lo que iba casi 30 bolos abajo en el cuarto cuadro. Dos strikes pasaditos y un tercero completaron el pavito que, unido a dos fallos de Lucian en la sexta y octava entrada, me hacían remontar la partida.
Los dos pusimos 9/ en el cuadro 9 y le aventajaba de 18 bolos (16 por el hándicap a su favor). Lucian metió pleno en la diez y yo un maravilloso agujero...agache la cabeza creyendo que estaba todo perdido, pero al levantarla eche cuentas y vi que necesita doblarse para ganarme...ahí si que me puse muy muy nervioso porque veía que el gran día podía irse al garete...lanzó Lucian y no dobló...así que era campeón de la Gala PLATA. Creo recordar que no lo celebré mucho debido a que Lucian es un amiguete y que, siendo sinceros, no lancé nada bien en esta final, pero así son las cosas en los bolos muchas veces.
Si el año pasado Reme puso la guinda a la buena temporada del club proclamándose campeona de España, este año he sido yo el que he puesto el broche de oro a otra gran temporada del club donde, tanto los peques como los mayores, hemos conseguido muy buenos resultados. Por mi parte, he tenido durante mis años de bolos otros logros importantes y bonitos, pero creo que este es el mayor.
Para ir cerrando otro de mis típicos "relatos cortos", agradecer primero a los que me animaron presencialmente para conseguir este gran logro (en especial a Reme por el estado en que se encontraba). En segundo lugar y aunque estuve muy centrado en la competición, gracias por todos los ánimos cibernéticos recibidos durante el juego y por todas las felicitaciones recibidas, SOIS MUY GRANDES.
